sábado, 26 de diciembre de 2015

El ídolo de las mil caras

Puedo sentirme orgulloso de que mi obra 
contenga un conjunto de características propias 
de las más grandes historias épicas,
es decir: cumple los preceptos del monomito.
Sin embargo, por mucho que leo no encuentro
la explicación trascendente de esa teoría...

Increible, hacen este montaje y no ponen a don Juan de Marco WTF
Nuestro protagonista de hoy es Joseph Campbell. Me he estado documentando a posteriori, como le pasaría a George Lucas, tras comprobar que mi obra casa con sus directrices. Cuando leemos o escuchamos a este antropólogo comprobamos que lo único que hace es desglosar y abrirnos una peculiar herramienta: nos está enseñando cómo somos los homínidos.

Para ello utiliza como referencias el comportamiento de pueblos naturales y, así, lo combina con el resultado de sus teorías. Y su tesis consiste en el monomito: las historias épicas que trata sobre héroes cumplen un patrón que se cumple en todas de una manera o de otra. Es decir, existe una fórmula del éxito a la hora de recordar una historia.


Este tema me ha suscitado especial interés tras haber visto la genial película de la Guerra de las galaxias de Disney. A mi juicio el enfoque que le han dado es el más adecuado, y ya veré si encuentro la manera de explicar el porqué.

En cualquier caso, los críticos, por supuesto, no faltaron: hay que fijarse en la peculiaridad de que cuando sujetos como Zecharia Sitchin no tiene críticos con nombre y apellidos, en el caso de Campbell sí los tiene. Eso quiere decir que, efectivamente, no estamos hablando de un antropólogo cualquiera, hablamos de alguien que ha herido de verdad la fibra sensible de la antropología.


Los que se oponen al monomito sostienen aspectos como que: no se puede generalizar sin documentar, no se puede juntar todas las historias sin tomar en cuenta las variedades etnográficas... Ahora bien, ¿son cuestionamientos contingentes? ¿Hace falta documentar sobre historias que son las más conocidas? Parece fácil de refutar ¿Qué importa la interpretación idiosincrásica de cada etnia cuando lo que se busca es el mito propio del homínido en su conjunto? Su trabajo recuerda a los estudios existentes que pretenden unir las lenguas...

Pero vayamos al asunto realmente mollar..., existe una corriente que emergió dentro de la mitopoeia que intentó aprovechar tales conocimientos. Todo eso unido con los típicos movimientos tipo..., en fin, en plan supersticioso que pretendía mezclar ideas que sugirieran más trascendencia espiritual. En fin, yo intentaré evitar pisar alguna mina.

La cuestión que habría que plantearse es: ¿qué debemos extraer de todo esto y por qué considero la película de Disney un avance muy positivo?

Resulta que la historia del hombre de las mil caras es, a muy vergüenza de todos, la historia de un hombre, un varón, un macho..., y, por tanto, las evidencias históricas, los aspectos que eran comunes en todos los mitos, siempre giraban en torno al santo varón heroico.

Los que se salen del esquema, entran en el esquema al crear una oposición.
Tenemos que hacer un análisis más profundo para comprender en qué consiste la idea del héroe. Cuando valoramos las historias de caballerías, como don Quijote o El señor de los anillos, vemos el arquetipo de lo que entendemos por un caballero. El caballero, el héroe, es quien se presta para servir a su dama, para cortejarla y estar siempre en su auxilio... El amor cortés, como bien explicó Campbell en una entrevista, forma parte de los roles constituidos a partir de los juglares, que fueron los verdaderos creadores de la mitología heroica civilizada: los libros de caballería.


A ver si lo explico bien..., las etapas de madurez por las que pasa el homo sapiens están involucradas con el modelo de civilización que tenemos y, en el caso de la civilización occidental, que fue la que marcó la hegemonía del progreso en todo el planeta, el feudalismo y los ideales consiguieron hacer prevalecer los únicos ídolos que no dependían de cada cultura. Esto es, si Dios, Buda, Mahoma, etc..., dependen de cada cultura, el ídolo que se mantenía en todas como un rasgo común era el héroe de las mil caras: la idea del amor provenzal que lo empuja a actuar como actúa más allá de las reglas sociales establecidas.

Sin ir más lejos, en los pueblos naturales no existe el enamoramiento; tan sólo en todas las culturas que se han estado civilizando mediante los estamentos se ha considerado el amor como algo que tiene que alcanzar una relevancia espiritual. Entonces, los individuos incluyen, dentro de su pacto social, la obligación de que deba existir amor.


Pero las personas no siempre respetan el pacto social. Algunas odian y aman al mismo tiempo, y eso es producto, también, de nuestra civilización y cultura. El hecho de que seamos tan complejos provoca que nuestra idea de amor sea mucho más complicada de lo que jamás las leyes podrían regular, por lo que el amor es algo que ningún legislador se atreve a tocar y, al mismo tiempo, se encuentra presente en todas las culturas.

Debido a que el oficio más antiguo es el de la prostitución, o eso dicen, el papel que desempeña el amor desmedido, en algunas culturas, puede convertirse en la confrontación directa contra la moralidad más divina porque, al fin y al cabo, cualquier aspecto cultural siempre tendrá por objeto aproximarse al verdadero ídolo, aquel que, como decía Nietzche, tenía fuerza daditiva.

Es por ello que el ideal del héroe, hasta hoy día, siempre había sido el ideal del rol masculino activo frente al femenino pasivo. Es decir, lo que tiene que hacer un hombre para ser un hombre de verdad. Esto mismo, ya sea en las culturas civilizadas como en los pueblos naturales, es algo que se repite hasta la saciedad: sin embargo el superhombre de Nietzche debía ser un héroe de las mil caras que haya superado las fronteras marcadas por la Historia del error. Es decir, no puede ser exclusivamente un hombre: debe ser tanto hombre o mujer. De ahí que la palabra usada por Nietzche le valga tanto a los hombres como a las mujeres, aunque este filósofo criticó, y muy duramente, a las mujeres de su tiempo.


Y ya digo que me siento orgulloso de mi libro y fascinado por esas últimas películas, porque estoy empezando a pensar que, a lo mejor, se está encontrando la manera de acabar con los ídolos que son propios de las culturas y, poco a poco, se van reconociendo a los ídolos de las mil caras: aquellos que nos unen. Los que nos definen y que podrían acabar con los chovinismos. Con lo superfluo...

Los más escépticos dirán que no existen tales ídolos, que los roles los marcan la cultura en cada momento..., sin embargo..., bueno, ya iré contando cosas.




Suficiente por hoy
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jueves, 24 de diciembre de 2015

Noche de Paz y noche de amor con los Anunnakis

Me he estado documentando sobre los a·nun·nakis
voy a tocar el tema de las cronologías
y vamos a ver si consigo generar la suficiente confusión
como para esclarecer algo.

Medio-Oriente bajo la mirada de medio Occidente.

Pues bien, ahora que me he documentado, ya sé exactamente cómo se escribe. Para empezar, hay que recordar que estamos hablando de un tema que está muy de moda en Youtube, y que está generando mucha controversia entre los aficionados al misterio, no tanto en la propia comunidad científica - y en este caso no es por un exceso de excepticismo.

Para entender el origen de tantos problemas debemos remontarnos al prólogo e introducción del siguiente libro: La historia empieza en Sumer. Aquí se detalla una guerra entre eruditos de este campo: ¿dónde está el origen de la civilización en Egipto o en Sumer?

Efectivamente, cuando tenemos este problema delante lo primero que piensa cualquiera es: el principio debe estar en Egipto, no hay nada más grande y evidente...


Pero cuando vemos las evidencias arqueológicas de Sumer, descubrimos una escritura, una cultura..., la revolución neolítica se podría remontar más bien a esa época. Y eso es lo que defiende Kramer. Ahora bien, ¿qué no casa? Cuando a Napoleón le dio por hacerse egiptólogo, se puso de moda Egipto debido a que los descubrimientos de entonces brillaban gracias a la piedra rosetta.

Es decir, la existencia del hallazgo marcó el protagonismo y las ganas de fijarse en sus teorías. Lo más sencillo acabó siendo lo que menos se debatía, los dogmas se tornaron hacia la mitología egipcia y, claro, entonces Sumer y su mitología sería la copia.



Entonces llegó Kramer y su compendio de investigaciones basado en las investigaciones de entonces, y, lo que antes era lo que estaba de moda, él lo revirtió. Ahora va a resultar que los hijos de Nut son los propios anunnakis, ahora bien, ¿por qué se ha puesto tan de moda esa puñetera palabra, y de Nut ni mu? No tan rápido, que aún la guerra no ha terminado...

La cosa es que los protosemitas de Egipto siguen pareciendo ser más antiguos que los protosemitas de Sumer y, por si fuera poco, hablamos de unos señores capaces de llevar a cabo una ingeniería bastante revolucionaria: como para reconocer clases sociales, religiones, etcétera... Así que, lo siento Kramer, pero por mi parte no traga.

Por supuesto, no haré mención de cierto autor de mi tierra que publicó un libro que decía que el origen de todas las civilizaciones está en Cartagena..., uf, ¡ése sí que lo tendría difícil para demostrarlo! El libraco era bien gordo, pero yo por algo así no daba más de tres euros. Así que no tuve la opción de leerlo.

Bueno, voy a seguir con la historia de la historia: resulta que un ruso, aprovechando que se estaba poniendo de moda la carrera espacial, estuvo contaminando a indígenas y no indígenas con historias de naves espaciales, textos antiguos de naves espaciales, etcétera...,

Te sacado guapito y afeitado, ¡y no te lo mereces!
Vendió muchos libros sin confesar nunca lo que está más que demostrado: se lo inventó casi prácticamente todo. O, por lo menos, lo más fascinante: que si las naves espaciales, que si todo eso está escrito en las tablillas, que si..., ¡vamos! Que nasti-di-plasti.

Y fue este tipo el que cogió la palabra a·nun·nak y la convirtió en an·nun·nak. Cualquiera de vosotros diréis: pues no es para tanto; sin embargo sí lo es, y mucho. La diferencia está en lo que está escrito en piedra: o es un símbolo (el del agua) o es otro símbolo (el del cielo) y, señores, AGUA y CIELO no son intercambiables.

Por tanto, o lo pone o no lo pone. Y, para el caso, no lo pone: anunnakis no significa los que vinieron del aire. Y más adelante empezaremos con los matices..., pero poco a poco.

Empecemos por un análisis profundo del significado real de la palabra a (agua), y luego veremos cómo enlazamos los anunnakis con el cielo.

Primero a la izquierda, a: agua, hijo, padre, origen

El agua para los sumerios eran los ríos Tigris y Eufrates. Por eso el símbolo que usaban podría recordar la idea de los orígenes de la vida. Todo lo que tenga que ver con el origen de la creación de algo es lo que sugiere la palabra agua. Así que cuando se coloca en una palabra no es de extrañar que también pueda significar padre, o incluso hijo, ante lo cual alguien podría preguntar: ¿cómo puede ser padre, hijo y origen a la vez? 

Para poderlo entender sólo tenemos que coger una palabra en castellano que haga la misma función doble; por ejemplo, comercio. Comerciar significa en ocasiones comprar, en ocasiones vender, pero el concepto es la unión de todo ese conjunto de transacciones. Pues bien, la palabra a, lo que significaba para los sumerios, era una idea que recordaba al origen, cuyo elemento visual podría ser el agua de los ríos, del mar...

Por otro lado, está la palabra nun, ésta hace referencia al poder, ser poseedor de algo..., en este caso, poseedor del agua original. Es como si vivieran en los orígenes de los ríos. Concretamente, en la montaña de donde nacen los anunnakis ¿Os van cuadrando las cosas? 

El intento de Zecharía de hacer creer que los anunnakis coincidía con la palabra hebrea anakim, no es más que un forzamiento anacrónico y, por tanto, las conexiones directas con el resto de las culturas, es decir, con lo que pone en la Biblia, ya supone un despropósito total.

Ahora bien, no os preocupéis, que ahora voy a traeros un poco de confusión..., ¿os acordáis de la entrada que puse sobre los hijos de Nut? (lo dudo, no me acuerdo ni yo...), pues bien: Nut es el cielo, y era una montaña, un dios, el que separaba el cielo de la Tierra..., la misma historia en Egipto es la de Sumer: la montaña donde se originan los anunnakis es Enki. Y así todo cuadra. Es decir, en mitologia romana (que nos pilla más cerca): Enki son las columnas de Hércules, salvando las distancias...

Pero como pasa con las distintas historias habladas, tan pronto uno cuenta algo, las familias se mezclan, se mezclan las historias, los dogmas, las creencias... Hoy día muchas personas están convencidas de que Enki era un anunnaki más, pero eso no tiene sentido: él estuvo antes de que el primer anunnaki apareciera: concretamente, del cielo emergen los anunnakis. Literalmente, porque An es la madre de los anunnakis, que es el cielo; y Enki fue quien la separó de la tierra..., y en el espacio que dejó surgió todo ese batiburrillo.

La venganza de la navaja de Occam
Así que, ¿todo esto significa que los sumerios pensaban que nuestros genes provenían del espacio? No tiene porqué, bien podrían asociar el origen de la vida al agua que cae del cielo..., y parece más sencillo de sostener. En cualquier caso, seguro que más de un científico defensor de Sumer a muerte no se digna a contar según qué verdades con el fin de mantener la moda de que los sumerios son más protas que los egipcios..., de ahí que el tema tire para rato y ningún experto diga nada.




Bueno, suficiente por hoy, 
espero que esto os haya ayudado un poco.
No olvidéis comentar...



lunes, 21 de diciembre de 2015

Microrrelato. El verdadero peligro

Ha ganado Rajoi,
la buena noticia es que no tendrá mayoría absoluta
la mala noticia es que nadie da la cara por esa clase de voto
hoy tocaré el tema del voto sin rostro

La perversa manipulación de los taurinos, pro-OTAN con acciones de petroleo de Greenpeace
¿os habéis percatado de que la retención en Gaza de la número dos 
de una de las formaciones más votadas no es noticia? 
¿o tampoco las palizas a miembros de formaciones políticas?
Pero fue noticia indiscutible un mero hostión..., ¿somos conscientes de la estupidez humana?


Microrrelato. El verdadero peligro.
Es bien sabido que, entre los navegantes, se dispone de un piloto experimentado por su capacidad para moverse entre las paradojas del espacio y el tiempo. A través de su nave, viaja virtualmente para conseguir introducir el fulong por el agujero de gusano: el ojo del huracán del ebani.

Los pilotos tienen una especial preocupación: encontrar a traductores nativos a los que llamarán contactados. Sin embargo deben tener un conjunto de características fundamentales para poder mantener el contacto: deben tener una cierta capacidad para ver el mundo en el que viven desde un punto de vista racional, lo cual no es, ni mucho menos sencillo.

La mayoría de las bestias de este universo no son capaces de contemplar la realidad tal cual es, tan sólo un porcentaje muy reducido, por algún casual que nos es extraño, es capaz de albergar alguna clase de compatibilidad con el entendimiento del mundo físico. Sin ir más lejos, las sociedades más avanzadas de nuestro sector han considerado la imposibilidad de hacer entender la topología del universo, para, automáticamente, programar el ordenador y que éste se preocupe de llevar a cabo las transformaciones y mediciones necesarias.

Este tipo de intromisión por parte de la computación en la ciencia no está asusente de controversia. La especie más científica por excelencia, los zetianos, que han sido catalogados como tales debido a la diversidad tecnológica y filosófica, así como las diversas aportaciones al mundo del debate que parte de ese planeta, tienen un comportamiento unánime, tanto por parte del sector militar como por parte del sector religioso, de que los ensayos participativos que lleva a cabo un computador provocan inherentemente la creación de un mundo que no tendrá porqué ser compatible con sus moradores actuales.

(Parte convenientemente omitida)

Esa otra raza, que ya ha entrado en contacto con la Tierra, y que también son científicos, aunque no se piensa que disponen de la pluralidad de ideas de los zetianos, ha conseguido el clamor popular de todas las brigadas al haber conseguido programar los fulongs para que los pilotos optimizaran los resultados de sus contactados. Y, habiendo una tecnología tangible, se les concede el liderazgo a la hora de considerar que el control de las fuerzas físicas está especialmente protegido por la neutralidad del computador.

"No es que no discrepemos, es que estamos de acuerdo."
Es algo que, ciertamente, a muchos se les pone los pelos de punta, porque: ¿quién dejaría en manos de una piedra inerte con cierta capacidad para replicar cálculos e interpretar resultados el destino de todo el universo? Sin embargo, los neutralistas, que es así como a algunos nos gusta llamarles, exponen, a cambio, un contraejemplo mucho más crucial: ¿quién pondría en manos de un vicioso con sus propios deseos, el destino de todas especies? Ninguna especie se salva de su visión personalísima de la repulsión que le produce entrar en contacto con ciertas especies. Sin ir más lejos, la situación de la Tierra, es un ejemplo clarísimo de lo que es llamado el verdadero peligro.


Los neutralistas son los primeros en despreciar por encima de todos los seres del sector de galaxias a los terrestres. No los quieren ver ni en pintura. El proyecto de los tres monos fue algo que no les agradó en lo más mínimo, pues supone un nuevo vector que debilita su proyecto personal: la mayoría de los neutralistas repudian los sobreapoyos espaciotemporales, porque parecen muy personalistas. Es decir, si una especie estaba condenada a la extinción, el interventor no debe forzar a la máquina a cambiar de parecer. Esto es porque la máquina no está diseñada para desobedecer a sus usuarios, pero tampoco está preparada para preveer qué ocurrirá más allá del umbral de sucesos.

La discrepancia con la Confederación fue claramente manifiesta: los intermediarios deben asumir su papel haciéndose ellos primeramente responsables por lo que experimenten y, si decidieran poner en peligro su existencia (disrupción ramificada para los zetianos, que vetan este planteamiento): entonces prevalecerá su opinión por encima del resto del equipo. 

Los que llamamos orcos del espacio, tienen una peculiar visión: muchos de ellos son neutralistas, pero se sabe de su alianza esporádica con los zetianos, lo cual dificulta muchas votaciones, porque en ocasiones el veto se materializa.

Se ha considerado, para no agravar los conflictos, no seguir enviando intermediarios y establecer una marca de seguimiento a los contactados: en la medida en la que los terrestres sean menos contactables los neutralistas ganarán la partida y los mundos se quedarán aislados espacio-temporalmente.

Ahora bien, sobre el verdadero peligro: es bien sabido que los terrestres tienen resultados genéticos cuyo origen está aún por indagar, debido a que la genética no se rige por ramificaciones. Entre los múltiples comportamientos, que han sido convenientemente mielizados, existe el carácter de lo que los neutralistas llaman el virgen en éxtasis.

El comportamiento del virgen en éxtasis es un peligro típico de los animales de sangre caliente y que se intensifica en los chimpancés y semejantes. Consiste en que cuando el animal recibe el visto bueno moral de llevar a cabo una tarea, y si éste entra en un éxtasis con la consecución de dicha tarea por activarle notoriamente las gónadas, entonces el especimen requerirá repetir, aunque la moralidad no lo considere aplicable. Tal es el caso que se especula que con la desaparición de los dogmas religiosos, los especímenes adoptarán disposiciones viciosas, que de ser bonobos tendrían carácter sexual, pero que al ser como los chimpancés, también estaría mezclado con genocidios ritualísticos.

La raza felina, gran defensora del áscesis a través de las gónadas, quiso tomar el relevo de la situación intentando dirigir el proyecto de los tres monos para que se salde con el menor número de bajas innecesarias. Sus poderes telepáticos son capaces de abrir y cerrar compuertas cerebrales, siempre y cuando dispongan de un mapa cerebral compatible con los patrones habituales.



Se ha comprobado que no todos los contactables reaccionan igual ante la entrada en contacto, por eso mismo cualquier clase de intromisión en el cerebro de los mismos se sabe que puede llevarles a un mal paso neurológicamente hablando. La cuestión que más suscita dudas, entre los que nos denominamos los cazaorcos, es ¿por qué resulta que los propios orcos se han hecho tan amigos de la imperturbabilidad del cerebro humano cuando no es así con los zetianos? ¿Tienen esa raza la creencia de que la demencia está ligada con los ebanis acaso? Se trata de una corriente conocida, pero desde hace eones deshechada. Así que no les vemos explicar su negativa, lo cual lo convierte en un veto intencionado. En cierta manera, al existir una intencionalidad manifiesta, se vuelve a equilibrar la balanza a favor de "los buenos".

También se ha debatido sobre cuál deba ser el componente psicológico para controlar mejor a la raza humana: a falta de estilo los buenos ritmos, ya sea de películas, música y videojuegos, podrían encauzarles hacia un estado anímico más propicio para llevarles a un estado más contactable.



La raza felina dispone, por tanto, de una horda de contactos a los que cataloga por su capacidad de maniobra, su ductibilidad, metavisión física..., y, por tanto, con la necesaria compatibilidad de lo que dicte el ordenador de a bordo. Sin embargo, últimamente, han dado con resultados inesperados - quizá debido a las paradojas, como la comprobación de que algunos contactados tienen activado un poder de manipulación equiparable al propio ordenador de a bordo y, combinado con los poderes telepáticos que tienen adheridos, están infundiendo respeto y temor entre las distintas razas extraterrestres, en especial sobre los orcos.



La raza felina ha determinado adoptar una postura extremadamente vigilante contra una raza peculiar entre los humanos. Se piensa que éstos podrían tener un conocimiento de cuáles son las fórmulas rítmicas que mueven al universo y que, por tanto, su contactibilidad es inversamente proporcional a su capacidad de ser movido por los ritmos espirituales generados para mover a los humanos.

(Parte convenientemente omitida)

¿Es posible que la exposición de sus conocimientos racionales pisen el proyecto felino de intervención psicológica mediante los ritmos? ¿Es posible que si estas fórmulas acabaran en manos de los orcos éstos las usen para acabar con el proyecto? La Confederación ha sido unánime con respecto a proteger la raza humana, sin embargo el tiempo se agota y los orcos han encontrado aliados terribles entre los propios reptilianos. Dichas alianzas no rompen los protocolos, y no paran de elaborarse nuevos protocolos para regular qué pueden hacer tales reptilianos con las informaciones que se van reclamando.




Ante esta tesitura los zetianos son más proclives a eliminar a los contactables que tengan tal tipo de afinidad. Aunque se sospecha que lo que realmente quieren es hacerle autopsias a sus cuerpos.


Registro Ea3Ft :: 245.23.43.24: JMDR. El verdadero peligro.





Esto ayudará a entender algunas cosas de mi obra
que disfruten de cuatro años más con Rajoi...