En mi metodología reconozco tres tipos de recursos literarios: las funciones de lenguaje (egrégores), las esferas (arcontes) y los objetos (aeones). Aquí hago un repaso de algunos arcontes partiendo del tarot de Marsella.
Bueno..., la verdad es que no tengo ganas de continuar escribiendo.
La razón es porque ayer ocurrió la confirmación de lo que va a pasar dentro de veinte años aproximadamente, de manera masiva y generalizada.
Imaginen que una notificación os llega a casa y pone que uno de tus escritos ha sido eliminado. Cuando te preguntas qué escrito no te dice nada, cuando te preguntas qué juez lo ha raptado no lo lees por ninguna parte y cuando te preguntas el motivo no hay pista alguna al respecto. Por tanto lo único que sabes es que algo que has escrito ha sido censurado por alguien por algún motivo, a eso lo llamo que te hagan una googlada - es una evolución a la tecnocracia de Microsoft.
Pues bien, eso mismo me ha hecho Google: me envía un correo diciendo que una de mis entradas (tengo varios blogs) ha sido eliminada.
1. No me dice qué entrada, ni qué parte de la entrada era ilegítima. Por lo que afecta a toda mi obra.
2. No me dice quién ha decidido que sea ilegítima. Por lo que la responsabilidad recae sobre todo Google.
3. No me dice qué política se aplicó. Por lo que supuestamente incumplí la treintena de folios de políticas que tiene la compañía.
Tanteando entre mis blogs acabo encontrando la entrada: "éxito personal + falta de reconocimiento social = aburrimiento", era una crítica a la falta de meritocracia. En esa entrada había la foto de un par de niños abusados supuestamente por un ovispo ¿Era eso? ¿No era eso? Hice una supuesta rectificación sobre la foto y me devuelven un correo (no sé si antes o después de la rectificación) que dice que la entrada fue eliminada definitivamente... ¿Está en proceso de revisión? ¿No ha superado la revisión? ¿Qué política ha incumplido? ¿Quién ha tomado la decisión de revisar o de no hacerlo?
Puro Kafka.
Una estimación sencilla de lo que va a suceder lo tenemos en la película "Idiocracy", ya he dicho que ocurrirá lo que he comentado arriba dentro de 20 años de manera generalizada, lo que quiere decir que dentro de 10 observaremos el primer petardazo con las macroempresas de tecnológicas - observo que todo apunta a Microsoft y Google (aún peor en Google) como no rectifiquen sus políticas tecnocráticas. Eso quiere decir que los países que mantengan su dependencia a estas compañías verán cómo las cosas más importantes dejan de funcionar, y nadie sabrá el porqué - ni cómo salir de ahí.
Lo vemos en la película "No mires arriba": las empresas tienen cierta tendencia a no dirigir las responsabilidades en las personas que sean responsables de los errores. Y eso tiene un precio. La primera revolución que vivió el modernismo fueron los entes jurídicos, que permitió que los empresarios no se hicieran responsables de sus propias decisiones para solidarizar las pérdidas entre los socios que confiaron en ellos. La idea es más turbia de lo que comento, porque una fórmula que podría haber servido para agilizar proyectos se acabó convirtiendo en una fórmula social para encubrir incluso delitos.
Ya es raro encontrar ensayos científicos donde el científico se haga responsable de sus errores. Más bien lo que se hace es localizar a los científicos que intentan promover la excelencia para ir contra ellos. Lo vemos incluso en el último sitio donde debería de darse estos encubrimientos: en los partidos políticos. La trasparencia, la revisión de pares, etc..., cada vez se está volviendo más un animal mitológico.
A cinco años vista ya tendremos los primeros algoritmos creados por una IA, que serán el sostén de todo nuestro sistema. Sin embargo, los que hemos estado estudiando el mejor de los transformers (chatGPT3) justo antes de que saquen la API, tenemos que habernos dado cuenta de que el código que genera es INVENTADO. Es decir, no funciona. Y sí, se puede pegar un balonazo y tirar para adelante..., con lo que sea. Y se acaba programando ALGO. Pero el código está orientado a la completitud de los requisitos, no a la confiabilidad de lo generado. Es como quien finge que sabe jugar al ajedrez, cuando solo sabe hacer movimientos legales; chatGPT3 no es capaz ni de lo segundo.
Señores, eso es idiocracia.
Y hasta que no veamos gasolineras explotando (como ya ha pasado en Cartagena), o aviones cayendo al no responder los mandos eléctricos (como vemos que sucede cada vez más), o simple y llanamente, accidentes múltiples donde se espera que sea el seguro el que se encargue y aquí no ha pasado nada..., y tampoco se encargará el seguro, y probará a subir las tasas a todos cada vez más de una manera disparada. Hasta que no veamos la mierda hasta el cuello..., no se va a reconocer que el modelo pasará SÍ o SÍ por esa fase. Y que algunos, los que más dependan de esas empresas, se pegarán un trastazo mucho mayor.
Ya no digo la inminente crisis que tendrán que sufrir los socios de esas empresas, los trabajadores, etc...