miércoles, 21 de octubre de 2015

Fraude...

Y tras varios días de investigación, compruebo que no puedo evitar la explosión combinatoria para el sharp..., una vez más. No valen atajos, no valen técnicas o averiguaciones..., 
el principio de inclusión-exclusión es a todas luces inalterable...

Volviendo a la realidad, y a la aceptación de los algoritmos de aproximación..., ojeo por Internet y me encuentro esta bazofia:


Al parecer este vídeo es un reclamo de algo muy turbio. De hecho, la fecha en la que se subió el vídeo por primera vez a Youtube coincide con una fecha muy especial para este libro y para el ilustrador Solux, como el último vídeo que le enseñé de los iluminatis se lo tomó muy a yuyu, mejor no le menciono según qué casualidades, que el pobrecico no está para sustos...

El caso es que me pongo a jugar como si fuera un hacker más a ver si descifro algo..., se ha extraído mucha información que el autor dejó en el vídeo..., entre otras cosas una posible imagen de la víctima del torturador de Boston que menos encajaba con el asesino oficial..., suena muy a yuyu..., espero que no sea una reivindicación.

Se podía leer en morse un mensaje muy explícito, bien podría significar los diez meses que perdió de jovial vida un famoso hacker que robó un modelo de la máquina Enigma 312..., así que, ni corto ni perezoso se me ocurrió que..., bah, ¿por qué no? Cojo un código que se lee ahí, lo paso por el enigma y leo lo que pone tras configurarlo con el código de cuatro letras explícito que ahí ponía...

¿Y qué saco en claro? HAZM TD... Si fuera un mensaje de móvil por parte de una novia..., tendría un significado muy explítito..., pero no. Cuando todas las señales apuntaban a Enigma, resulta que no hay manera de descifrar nada ¿Saben a lo que yo llamo esto? ¡Un fraude! Y eso es de lo que voy a hablar ahora.




En mi novela, para cuando todo termina, el planeta sufre un tipo de contaminación masiva..., como si fuera una de esas películas de zombies más modernas, tienen que hacer aparición los de los trajes. Y es que el supervillano está volviendo todo el mundo hecho unos zorros.

Muchos siempre se lo preguntan, los tebeos típicos de supervillanos suenan muy fantasiosos por la sencilla razón de que un supervillano no gana nada pretendiendo destruir el planeta, pues entonces, ¿dónde viviría él? Entonces es cuando aparece el supervillano recreado por Samuel L. Jackson en Kingsman..., no siempre los supervillanos son tan fraudulentos como parecen.

La K de Kingsman girada para que parezcan unos cuernos..., efectivamente, no hay significado - sólo estética.
El fraude es cuando se espera que un supervillano se tome varias molestias en enviar mensajes para que entonces el prota vaya descifrando..., como en la Jungla de Cristal 3... Es un tópico de los malos: cuanto más inteligentes más brillante debe parecer las ideas de ese bueno que necesita que le explique con claridad las cosas.

Sin embargo, y eso pasa en mi obra, en ocasiones los malos intentan cosas - y no les sale. Los planes no salen a la primera tal como estaban planeados o como debiera..., se tiene la idea de que iban a tener cierta relación el chico y la chica y, al final, resulta que la historia consigue acabar dejando proyectos a medias..., ¿se llegaron a plasmar tales proyectos en cierta manera? No me preocupo de dejarlo claro. Cada lector que tome sus propias conclusiones.

Algunas señales están tan mal que provocan muertes. Lo normal es la desidia, no la intencionalidad.
Los planes pueden ser muy enreversados. Como los que se presentan en la película Desafío Total, la primera versión. Donde ya de por sí el plan era complicado y, como es lógico, va mal y se enreda; todo hasta el punto de que la película acaba con un doble final. 

El caso es que, tras semanas de investigación voy a tener que conformarme con el premio de la consolación en mis investigaciones tecnológicas; esto es porque, cómo no, yo también me equivoco. Pero la novela, por lo menos, tiene cierta intencionalidad: los personajes se enfrentan entre sí y cometen errores, se levantan, se cuestionan..., no son perfectos, pero son puros. O al menos procuro que lo sean.

Dentro del mundo del fraude están los contaminantes, he evitado ese tipo de personajes. Un contaminante en realidad es una persona que se equivoca y, debido a su mezquindad, no quiere admitirlo y, para ello, crea una escuela con todo su orgullo: crea un cúmulo de ideas alrededor para dar a entender que el problema está en torno a esa persona..., que los demás deberíamos de ser así.



Las personas contaminantes intentan centrar su atención con maestría hacia temas que no tienen nada que ver con el problema, de manera que parezca que sí es lo importante. Entonces, para desviar la atención, son capaces de señalar con el dedo a los que le estorban y llamarlos tóxicos.

Ya en otra entrada mencioné la necesidad de distinguir a los tóxicos de los intoxicados, igual que no debería de confundirse a un loco con un enfermo mental (el segundo requiere ayuda). Los contaminantes son los que intoxican, los que pervierten la razón por la cual las cosas no funcionan para dar a entender que la víctima es en parte responsable.

El gato que está triste y azul..., nunca olvida que fuiste mía.
En mi novela la Luna representa el recuerdo de un fraude, cómo aquellos que son más venerados en realidad viven de la contaminación. Al mirar la Luna uno de los personajes recuerda con tristeza aquello que lo convirtió en otro fracasado. Y es que una luna representa mucha melancolía, pues lo que oculta detrás es el hueco que se hospeda en el recuerdo ante una forma que no tiene cabida en ella.

Es muy fácil dejarse caer por las mentiras de un experto cuyo lenguaje es demasiado complejo como para cuestionarle. Sin embargo, ya lo decía Wittgenstein: ¿qué es lo que hace que creamos que tenemos un cerebro? Pues, si va a ser gracias a los expertos, entonces no será porque nos convencieran con su jerga, sino por los hechos.

Esconder el pasado, reconstruir una jerga basada en el indulto, la amnistía...
Toda esa gente es un auténtico Fraude. Podemos equivocarnos con pureza o podemos no ser consecuentes. Cuando pillan a uno de los personajes en mi obra, éste lo admite..., hay que admitir los fallos. Cuando ya no hay camino para avanzar hay que admitir las limitaciones. Siempre es posible continuar las investigaciones por otras vías, descubrir alternativas..., pero donde hay un muro que bordear lo primero es admitir que está el muro.

Por esa razón en mi obra también hay casualidades que son motivo de susto por parte de algún personaje..., como si las cosas fueran incluso aún más rebuscadas de lo que pretende la propia obra. Pero el mundo, incluso en la novela, es mucho más sencillo: cuando toca una casualidad, es una casualidad. Nada más. Como se dice en bocas de una pitonisa: la suerte en ocasiones intenta llamarnos la atención.

Porque, ¿qué es tener suerte o no tenerla? ¿Qué significa equivocarse? ¿Qué significa estar mucho tiempo investigando y acabar defraudado? ¿Qué significa entrenar durante mucho tiempo para las olimpiadas y acabar ganando la jodida medalla de plata?


Si decimos que el ser humano adopta sus decisiones dentro de cuatro dimensiones a lo largo del tiempo, no estaremos engañando a nadie: el cerebro ocupa tres dimensiones espaciales y, además, estas dimensiones pueden estar relacionadas con una carga electromagnética..., es como si fuera una cuarta dimensión. La consciencia, por tanto, va generando instantáneas espacio-magnéticas a lo largo del tiempo..., si sólo repercutieran esas cuatro dimensiones (y no lo sé) significaría que ante la instantánea de ver el resultado en tres dimensiones, en la dimensión electromagnética albergaríamos eso a lo que muchos llamamos suerte.

Adquirir una experiencia a lo largo de los años cargará el cerebro con un conocimiento, un talento. En informática sabemos que sólo se puede almacenar cortocircuitando o entrando en un ciclo de histéresis a través del electromagnetismo. Es decir: o destruyes en el espacio tridimensional un material o intentas emitir una señal electromagnética.

Los músculos del cuerpo reaccionan al unísono gracias a una orden síncrona del cerebro que ha sido entrenado para que las neuronas del músculo puedan sincronizarse y ofrecer el máximo rendimiento. En mi novela presento un juego de tres reglas que consiste en hacer caer al contrincante: no es un juego de suerte, sino de engaño. El engaño es la capacidad para doblegar la realidad a tu favor dentro de las reglas establecidas. Bien podría considerarse un deporte, pues los contendientes estarían limitados por unas reglas que permiten el que se especialicen.

Cuando tenemos, también mencionado en la novela, un juego como el valetudo, éso no puede ser un deporte. Porque los contendientes tienden a matarse entre ellos, no se pueden especializar en ese deporte. Igual pasa con la lucha libre televisiva, que no es más que bailoteo - todo fingido.

Al final, si es cierto que hay una dimensión a nuestro servicio, no es de extrañar que pueda haber incluso extensiones de nuestro cuerpo que lo atraviesen..., o incluso hasta criaturas que puedan afectar a nuestra suerte, nuestra vida o muerte...

La parca versión japonesa siglo XXI

Y al final, ¿qué nos queda con todo esto? Pretender jugar una partida de ajedrez con la parca para intentar ganarla. Pero, tarde o temprano, la suerte estará de su lado. Es inevitable porque ella tiene registro de todo cuanto sucede, como se explica en la parte de la novela en la que el alma de un muerto se divide en tres, una de las partes tiene registro de toda su vida, y es muy engañadora. Quien se deje llevar por los registros de su cuerpo, el libro de Thot, su ADN, los sesgos cognitivos..., entonces sucumbirá al vicio, al fraude, la intoxicación, la pérdida de la voluntad..., el sometimiento de la conducta y la muerte en vida: la pérdida del báculo, acabar en el esperpento - volverse un imbécil.


Esta película tiene un final que hiela la sangre, muy cristiana, pero no por ello falto de simbólismo.


martes, 20 de octubre de 2015

Rimas sueltas



No era una niña que lucía 
No era porque no quería
Sólo porque siempre solía
jugar con mucha algarabía.

Ven vamos conmigo y salta
desde esa Bali hasta Malta
aquí si el desdén se asalta
prueba la torre más alta.

Te colocas este aparato
juegas solo conmigo un rato
una partida y te mato
prende ya al duende y al gato.

No merecía un tortazo
la crueldad ha hecho del trazo
prendas rotas de un zarpazo
conmigo es un gran mazazo.

En ocasiones deseamos
ocasiones que si os amamos
deseamos borrar amos
muchos los imaginamos.

Están por ahí pululando
merodean como andando
menudean comandando
ningunean aun estando.

Ten cuidado niña inquieta
desdén y alerta la bragueta
pues abierta no te respeta
sabes cómo ella se repleta

¡Cómo te dejas engañar!
se sabe que lo va a intentar
las niñas lo van a cazar
traen para verlo atrapar

Con un cebo caerá
esa niña lo atrapará
no habrá forma y llorará
podrá fingir, suplicará

Porque aquella de quien hablaba
siempre era dura y lo trataba
supo llevarlo y lo cuidaba
estar atenta por si andaba .

Lucía aprende lo que sabe
apunta todo lo que cabe
y afilada como un buen sable
siente una puerta que se abre.






lunes, 19 de octubre de 2015

El Principio Fundamental de la Manipulación

Entran ganas de escribir cosas cuando las titulas con un título como como éste...,
 quizá me veo con más ganas porque ya estoy terminando cierto proyecto...


Sin ánimo de insultar, en éste mundo existe un cierto cúmulo de personas a las que podemos tildar de auténticos imbéciles. No se trata de un insulto cuando lo digo yo, sino de una calificación perfectamente medida y muy bien estudiada.

En otra entrada creo recordar que introduje el término, como así creo que es expuesto en mi novela: el imbécil es una persona que no tiene criterio. Ahora bien, para no tener criterio hace falta tener la oportunidad de disponer de él y despreciarlo. Es por ello que, dentro de mi filosofía, considero que el imbécil es una persona que ha adquirido una educación a la que no ha dado provecho.


Esto quiere decir que, cuanta más educación desaprovechada más riesgos corremos de volvernos imbéciles y, sí señores, no hablo de estudios inútiles como el coeficiente intelectual, ni alteraciones posiblemente innatas, como pasa con el autismo o el síndrome de down...

Ser imbécil ubica al sujeto en una situación ética reprobable, pues durante un tiempo estuvo en una situación privilegiada que, lejos de aprovecharla, la ninguneó y, ¿bajo qué criterio? esa es la cuestión: bajo ninguno en cuestión realmente (aunque éste se piense lo contrario).


Hay valores rellenos y otros que están huecos. En mi novela hay personajes que tienen una vida hueca y sin sentido; concretamente dos, pero uno está muy formado y el otro es aún joven. Ha sido mencionado en mi novela por distintas vías la enorme facilidad que se puede llegar a tener para gobernar sobre aquellos que no tienen ninguna clase de criterio para actuar como actúan. 

Y es que, efectivamente, esta entrada la voy a dedicar a la dominación: la capacidad que tienen muchas personas de conseguir ser dominadas por un tercero, ya que se trata de una capacidad pasiva, la actitud la tiene la víctima frente la aptitud del dominador.


Como si fuera un mero edificio el dominador hace acto de presencia, se ubica en lugares estratégicos como el cocodrilo cuando deja la boca abierta a la espera de que su víctima se deje atrapar. Y la cosa es que las víctimas que más se dejan atrapar son justamente las que posicionan sus puntos de vista como si fueran máquinas: o cero o uno.

No hay que confundir tampoco a los imbéciles con aquellas personas a las que no les va bien en los estudios. Una de las cosas que también son mencionadas en mi libro es la distinción entre los que usan el lado derecho del cerebro de los que usan el lado izquierdo, para así reflejar distintos tipos de aptitudes para las que están hechos los personajes en cuestión.

Es imposible que dos personas con cosas que decirse piensen igual, salvo que sean imbéciles.
Efectivamente, cuando se trata de dominar a una persona, bien puede alguien que sepa cómo se hace, aprovechar las limitaciones de criterio que se tiene para suscitar memes o comportamientos zombies de manera que pueda ser colocada, como si fuera una ficha o estatua, en una posición estratégica del tablero o juego del ajedrez.

En un capítulo del infrarrojo menciono unas reglas de lo más siniestras sobre cómo jugar a lo que llamo el ajedrez cuántico, donde dependiendo del color de la casilla donde se encuentren las fichas las reglas pueden provocar un control de las piezas enemigas, desapariciones forzosas, etc... Es muy fácil hacer cambiar de camisa a quien se aferra a un concepto como si fuera lo más importante, como una reseña de pertenencia máxima.


El truco para que se cambien de camisa es no diciéndoselo: dándoles de comer aquello que les contradiga, ubicándoles en la misma posición que otros colegas suyos exactamente iguales para ver cómo éstos repiten exactamente la misma cosa en cuestión... Cuando tienes identificadas las piezas, y el perfil de una pieza se mide por cómo se mueve, puedes empezar a jugar a esa versión que mencionaba... 

Un personaje explicó que para saber cuál es la forma hace falta estudiar el movimiento y no la perspectiva
La perspectiva que refleja el mundo en donde nos sumerge el dominador nos permite adivinar cómo escapar de ahí, pero ese es el papel de las enredaderas de la luz y el rayo. Aquellos que buscan la verdad se escapan de la noche para descubrir los entresijos del mundo donde habitamos todos. Éste es un poder muy activo, pues es la actitud de quien quiere doblegar a la mentira.


Sólo unas palabras y se debe someter. Esa criatura no doblegará a los débiles. No está autorizada.
Pero aquel que no dispone de herramientas para no ser sometido será el primero en decir: "yo nunca seré dominado", "sé que ése es un desinformador", "sois unos borregos"...

¿Acaso es fácil saber cuándo el que nos llama imbécil no es como aquel que nos llama borregos? Mi apreciación es muy sencilla: uno de los dos no será capaz de mantenerse en su argumentario. Uno de los dos no será capaz de justificar sus ideas y hacer que todo cuadre. Uno de los dos se valdrá de dogmas y más dogmas que, lejos de simplificar y hacer que toda la realidad cuadre, sólo servirá para complicar mucho más el mundo vivido.

Pero no hay que pensar que realmente el que es consciente de lo imbécil que es el otro lo va a tener todo más fácil.


Lo normal es que haya que luchar mucho para que se den cuenta de que están siendo controlados porque, efectivamente, tienen un chaleco puesto y se sienten muy a gusto con él. No son conscientes de que el lenguaje y el uso de la razón les convierte en presa fácil de quienes usan el lenguaje artístico..., y a la larga serán ellos los que se sientan frustrados. Porque la tendencia es para los buenos: la Justicia siempre prevalece.


Es por ello que los amos del mundo necesitan valerse de los trolls que les interese. Debido a que últimamente Putin está jugando muy pero que muy bien su baza, el bando de Obama ya ha comenzado, desde hace tiempo, con la censura a los medios pequeños: hacen una selección de qué trolls son los que les conviene incitar.

Igual que pueden dar material a algunos que les condenen, para así alimentar el meme que les hace más fuertes, hay otros a los que conviene frenar para que no alimenten a los enemigos de sus aliados.

Pero, en el fondo, se atreven con los que tienden al 0%-100%, esto es, a los más bipolares. Esto es porque el bipolar tiene alianzas débiles y malos recursos para argumentar. Se convierte, por tanto, en un mal estratega incapaz de emitir luz por sí mismo o misma.

Así que el Principio Fundamental de la Manipulación es que no hay marioneta si no existe el hilo que la mueva más allá de donde ella quiera ser movida.






Ya vale por hoy, no olviden discrepar y comentar...



viernes, 16 de octubre de 2015

Luces, cámara..., ¡acción!

Se levanta el telón,
 aparece un periodista diciendo que se encuentra en un escenario, 
pero nadie le hace caso..., 
¿cómo se llama la película?

Lectura de pensamiento: "Paso de Varufakis"

Muchos se quejan, y con razón, de la clase de mundo en la que estamos inmersos. Pero este mundo es tal como nosotros lo configuramos. Somos nosotros los que conformamos quiénes nos representan. En mi novela hay un momento en el que hace presencia una gárgola, pero da la impresión, por cómo describo la escena, que sólo una persona ve a esa criatura con su formato original. 

Los otros dos testigos ven a esa criatura desde el punto de vista tridimensional, esa otra dimensión más electromagnética, esa otra forma de influencia sobre el espacio y que podría conformar la anatomía de un hipotético ser tetradimensional..., directamente se ignora. Podría uno imaginarse unas alas, una complexión reptiliana..., pero serían facciones traslúcidas, no parecerían demasiado tangibles.


Si no te gusta no mires, será como si estuviera donde quieres.

Pero los años nos dicen que puede haber una buena razón para actuar o no: la razón es evitar la frustración. Queremos reservarnos para cuando creamos que vamos a conseguirlo, reservarnos para cuando creamos que el mensaje vaya a quedar bastante claro.


Cuando los violentos están rodeados no actúan.
Sin embargo, de vez en cuando se hace un recuento de todo lo que ha estado sucediendo y nunca pasa nada. Da la impresión de que la gente se sigue reservando más y más, más y más...


Y los reporteros son destituidos, se extraen auténticos bombazos pero a penas recala sobre la sociedad. Sabemos que son unos sinvergüenzas pero da la impresión de que no nos parece tan importante. Es más importante conservar nuestro bando, ¿cuál es nuestro bando? ¿Es tan importante la alineación?


Tan pronto nos definimos con orgullo, tan pronto nos arrepentimos. Quedamos retratados y nos obligan a retractarnos ¿Es tan fácil definirse? ¿Se puede reducir todo a un sí estoy a favor o no, estoy en contra? En ocasiones cedemos todo el poder a unos señores para que la líen..., cuanto más poder tengan más importancia tendrán las consecuencias de sus actos.


Al final da la impresión de que debemos perdonarles cualquier cosa ¿Tan difícil es que no se equivoquen de manera estrepitosa? Es como cuando se ve a un líder de izquierdas defender a capa y espada el trabajar con un iPad en el Congreso, criaturita..., o ver a un líder que defiende la unión de la izquierda someterse a un partido para ocupar un puesto donde no representa a sus bases..., ¡menudo panorama! Me pregunto si aún hay algún valor inviolable...

Por cortesía de..., ¡que no que es coña! Copyleft, ¡cómo si no!
En la medida en la que vemos cómo van colocando líneas rojas vamos distinguiendo su silueta. Es lo único que podemos comprender. Si no marcan líneas rojas entonces, ¿en base a qué nos vamos a poder fiar? Como cuando el presidente promete no subir los impuestos y, entonces..., ¿qué hizo?

En los tiempos antiguos el molinero era el eje de la civilización

Pero algunos seguirán aceptando las nuevas medidas, porque esas líneas nunca fueron rojas para ellos. Línea roja es que no gobiernen los del otro bando; lo único que es lo más pervertible, la alineación. Con qué facilidad un miembro de las juventudes falagistas puede convertirse en el líder de un movimiento socialista, hasta el punto de gobernar un país agrietado con heridas franquistas. Así se consigue que los herederos de la dictadura conserven su patrimonio, su honorabilidad..., su amnistía.


Asumir con vergüenza que nuestro pasado no es digno de orgullo es el primer paso. Pues uno debe aprender a avergonzarse ante sí mismo de lo que fue, ése es el primer paso ¿Cómo podremos responder por nuestros actos si no tenemos actos que sean propios de nuestra forma de ser? Sin una forma de pensamiento bien definida, sólo hay dispersión a nivel ético... Los personajes de mi novela afrontan diversa clase de miedos, y asumir el deber de afrontar un proyecto para hacerlo real es la más importante de las líneas rojas.

¿Y qué ocurre en mi historia cuando algo es demasiado inconsistente y tú demasiado importante? Aparece una luz roja con ganas de devorarte. Es el destino de los que tengan mala ética.

Fundamental: Las blancas juegan de una manera y las negras de otra.

Obeder a las élites más disciplinadas para poder rendir cuentas y que todo cuadre. Pero, ¿qué hay que hacer para que tu denuncia se convierta en un meme, en un juego de ajedrez, una repetición...? Está claro que este autor no puede tener todas las claves, de ser así ya estaría vendiendo esta obra a borbotones.

Pero hay unas claves: 
1. Saber entre los ganchos cuáles son las blancas y cuáles las negras
2. Reconocer a los terceros que no son destino del mensaje. Para crear las reglas y evitarlos.
3. Limitar el ámbito de los destinatarios. Para crear el lenguaje - el tablero.

Y sí, como con los proyectos económicos: la capacidad de riesgo es como tener piezas, conocer el mercado laboral es saber en qué terreno juegas y, por supuesto, las reglas de tu empresa dentro de la realidad jurídica es tu idea de empresa, el mercado. Al final una empresa es una sociedad, y su grandeza real fue correctamente definida por Keynes: son las personas que la conforman. 

El conocimiento os encerrará en la Libertad que elijáis


¡Basta de dogmas! Comenten...


miércoles, 14 de octubre de 2015

La Guerra Fría y el Chantaje.

En los tiempos que corren, así como pasa en mi libro, la mejor forma de combatir es fingiendo que no hay combate. Mediante la insistencia de dos grandes facciones de querer destruir su tecnología obsoleta para seguir construyendo más y más, al mismo tiempo que justifican la industria armamentística..., en el mismo instante en el que se descubra que el enemigo ha desaparecido, como le pasó a EEUU por un tiempo - lo que provocó una enorme crisis, todo su enorme imperio de la muerte desaparecerá o se reinventará con enemigos invisibles...

Putin es un experto en el juego del ajedrez de la guerra fría y sus mentiras.
Quería sacar a colación la siguiente noticia, donde pone de manifiesto cómo Putin está deseoso de encontrar blancos 100% terroristas, que el señor Obama colabore con él en localizar los puntos donde bombardear, que le explique cómo sabe que esas armas entregadas a los sirios en paracaidas es para el gobierno estable, etc...

La jugada que ha hecho Putin es del tipo "blancas mueven y amenazan pieza clave", si Obama no hace nada, entonces la noticia se quedará como una postal fija que hipotecará las relaciones internacionales de EEUU, Rusia irá ocupando poco a poco posiciones clave que inducirán a pensar que hay disciplina entre los suyos y, poco a poco, tendremos un nuevo telón...

En mi novela intento reflejar estos aspectos ¿Qué podría pasar en el hipotético caso en el que la mayoría de los países hicieran caso a Rusia? En el mismo instante en el que los siervos del mundo se vean consolidados mediante las fórmulas rusas, poco a poco no sería difícil imaginar hacia dónde iría cambiando el orden mundial. 

Se cambia un tablero de ajedrez por otro, se desecha aquel que ya no sirve.

Los de la jerga apocalíptica suelen vincularse con los que defienden la Verdad


Por eso, si Obama, teniendo el mundo en crisis y todo patas arriba, generando tanta destrucción..., intenta vendernos la auteticidad de esta clase de mundo ignorando las pocas demasiado importantes verdades que exponen sus rivales, entonces cabe esperar que se encuentre cada vez más más solo y que las fronteras ideológicas que tienen los países se intensifiquen en la discrepancia que haya entre esos dos rivales: Rusia con EEUU, ¿el resurgir de la izquierda contra la derecha?

Todo dependerá de cómo lo quiera configurar Putin, pero por encima de todo, están los medios: ¿Y si Rusia Today se convierte en un referente de aquellos que lanzan mensajes por Internet para influenciar en las teorías de la conspiración en Europa y América? ¿Hasta dónde podría influenciar según qué posicionamientos?


Debates configurados bajo la premisa de que lo que nos interese a nosotros parta de la base de aquello que le interese a los rusos y, por tanto, una manera de inclinar las intenciones de las personas a la hora de decidir qué es mejor o peor. Una transformación del punto de mira de dónde se encuentra el Imperio. El que es cardinal en los debates, es el que nos dice qué es lo auténtico: el Emperador.


Pero no nos engañemos: cuando las negras recuperan la cardinalidad del liderazgo, mantienen su hegemonía, pero no pueden dormirse en los laureles porque en cuanto las blancas sean capaces de establecer un bastión fijo, tiempo correrá a su favor a través de la guerra de desgaste.

Toda esta jerga de estrategia militar también aparece en mi novela: la madre de Pedro es una brillante estratega, aprovecha los conocimientos que tiene de juegos de estrategia y militares para enseñar a su hijo la filosofía del engaño en sus tres diferentes vertientes. Dependiendo de cómo juegue tu adversario conviene transformar tu manera de atacar o defenderte.

Está claro que Putin está dando donde más duele.
Pero muchos lo pensaréis: ¿en qué puede repercutir la palabrería política internacional con los negocios? En mi novela pongo de manifiesto que cierto grupo de extraterrestres tienen el deseo de imponer una guerra fría, para que así ellos puedan tener un mayor control, quien te da de comer es el que marca los pasos. Lo vimos en la película Delicatessen: quien corte el pastel es el amo.

Y si no hay nada que cortar, se busca de donde sea...
Ya lo vemos con el TTIP, estamos ante un fin de ciclo y las corporaciones necesitan el visto bueno de las naciones. La nueva OTAN necesita que los distintos países se sometan, pero los políticos menores, si no están convencidos, no votarán a favor... Y esto nos lleva a que, posiblemente, EEUU quiera buscar proveedores a otra parte (como si fuera tan fácil)..., ¿tiene realmente EEUU el control sobre la TTIP o debe mantenerla a base de chantajes contra la democracia?

Las monarquías se crean para que los países no puedan ser chantajeados.
En mi novela introduzco lo necesario que es una monarquía pero, ¿para qué un monarca? Sobretodo, ¿qué sentido tiene un monarca que sea corrupto, vicioso, hipócrita...? Visto así, ese país tendría una enorme incapacidad para asegurar la globalización, y sería presa fácil de tiburones atrapapaíses: por un módico precio pones aquí un decreto y ninguneas a ciertos competidores. Si, por el contrario, has perdido toda autoridad para poner decretos, puede que también la hayas perdido para controlar la corrupción en tu país..., mal suena el asunto.

EEUU, como el Hortelano, necesita dar de comer a sus perros para que no se pongan contra el amo.
Pero hay que tener mucho cuidado, pues detrás de cada cambio existen nuevas perspectivas con sus propias mentiras. Igual que hay republicanos en España que están más preocupados con desvirtuar las razones de porqué existe la monarquía atribuyéndole cosas que no tienen nada que ver, también vemos a periodistas antisionistas que entremezclan sus noticias con posturas que son puro antisemitismo, o fascismo puro.


Mientras tanto, en sudamérica nace un neofascismo alimentado también desde Rusia con amor.
Como ya decía uno de los personajes de mi libro: Cuando tengas toda la información de las distintas facciones, lo realmente complicado será descubrir a qué bando perteneces.

Esto es porque todo está mezclado: buenos y malos, cada uno defendiendo posturas extrañas; pudiendo estar todos en parte equivocados. Y, mientras tanto, se sigue con una campaña de información y desinformación.

Cuando los mares se sequen seguiremos remando por mantener la ilusión, mientras secamos el cielo.




Suficiente hasta aquí. No olvidéis cuestionar mis planteamientos.



martes, 13 de octubre de 2015

¡Con las ganas que nos tienen!

Hola de nuevo, no paro de construir y reconstruir, los sistemas virtuales que estoy construyendo están sufriendo una (creo) última renovación. Éste será la versión 11 y definitiva, he creído contar 9 ecuaciones y 9 incógnitas..., esta vez sí. Luego me he quedado mirando la estructura, y me ha dado un tufillo a...
¡Buaf! ¡Qué paranoia! Que venga Gug y lo descifre...
En mi libro hay un capítulo que en las series bien podría catalogarse "de relleno", pues no parece que tenga nada que ver con ninguna trama y, al mismo tiempo lanza cortinillas de humo con mensajes subliminales sobre otros temas para ayudar a comprender cuál es la psique de los personajes.

En este capítulo se menciona la aparición de un grafitti en el centro con un mensaje esperanzador. No es de extrañar que yo a ese tipo de manifestaciones lo quiera comparar con las señales de las cosechas.

El mensaje no es que estén jugando con nosotros, ¿o sí?
Los llamados círculos de las cosechas en mi libro tiene dos menciones independientes: uno es cómo lo ven los de abajo y el otro es cómo lo ven los que lo dibujan. Esos a los que llamaba los papis de las galaxias tienen ganas de ponerse de manifiesto, sin embargo un paso en falso podría significar la pérdida de la consciencia pero, ¿qué es la consciencia? Veré si para este post os ayudo a aclarar de manera definitiva ese tema porque, por supuesto, aquí el menda también tiene respuestas para esos temas.

Hoy toca hablar de la consciencia, espero no equivocarme demasiado.
Ayer mismo me puse a escuchar un Podcast del genial Iker Jiménez (empiezo llamándole genial porque ahora voy a empezar a darle palos), en ese Podcast nos hablaba de ese último hayazgo creo que por África donde unas mozas bien delgaditas, disciplinadas y valientes fueron capaces de arrastrarse hasta una concavidad donde había unos huesos - huesos que romperán los cimientos de todo historiador sincero, según parece.

No voy a meterme con la posibilidad de que aún sea demasiado pronto como para que se hayan equivocado en las dataciones o cosas de esas..., no sería la primera vez. Sin embargo, sí me parece interesante las conclusiones que habría que extraer del hayazgo.

La ciencia sólo sirve para lo que sirve.
Resulta que el hayazgo era que los huesos eran demasiado antiguos, habían enterrado al eslabón perdido (quien sabe si la propia Iglesia para esconder las evidencias darwinistas), aún es demasiado pronto para saber con certeza nada, pero la especulación que ha saltado con más fuerza es que sus propios congéneres hace millones de años, siendo medio monos, ya celebraban entierros. Las evidencias están en el cuidado de los huesos, propio de ceremonias...

Como podréis comprobar no me he preocupado en documentarme al respecto: mi obra no se basa en cosas que pasaron en el pasado, sino en cosas que se repiten en todos los tiempos; y de qué somos conscientes al respecto. Por eso mi obra es futurista.

Pero no quería cuestionar la teoría más oficial, recordad que el tema de hoy, mis invisibles lectores, era la consciencia y el papel que desempeñan los círculos de las cosechas.

El tema es que, ¡uf qué complicado...!, en mi libro lo dejo todo tan implícito que da gusto... ¡Si es que lo mío son las novelas y no el tener que explicar los sesgos biológicos! Por eso, lo mejor será usar una parábola...

Para poder ser más explícito os voy a devolver a la realidad de la que no podemos escapar ninguno: nuestra sana demencia - la que tenemos todos.


Imaginad que un alienígena proveniente de Zeta Retículi con un rayo láser capaz de obnubilar la mente por unos minutos se ubica detrás de dos adolescentes que casualmente se han sentado juntos: un chico y una chica. Y lanza su rayo contra las cabezas de ambos quedándose absortos y sin secuelas físicas. Con las mismas, porque los de Zeta Retículi son así, junta ambas cabezas para provocar un beso de película. Deja pasar el tiempo y entonces ambos adolescentes recuperan la consciencia en ese estado.

La mente de ambos interpretarán: no es posible que justo hace un momento estuviera a medio metro pensando en la asignatura de matemáticas, aplicando el principio antrópico interpreto que en realidad estaba pensando en la pareja de al lado y optamos por besarnos de manera consentida. Es así como los dos construirán una historia que nunca sucedió, pero que para los dos es la más auténtica.

En mi obra también hay zetianos buenos. No me gusta dejarlo todo de un color.
Su lado imaginativo, el derecho (el que une secuencias), someterá entonces al izquierdo, el lógico, y unificará las partes que se han quedado por resolver. Recogerá, de todos los mundos posibles, los compatibles con la realidad que esté viviendo el sujeto y, a partir de ahí, continuará con la historia asumiendo los fallos éticos y morales por haberse precipitado contra la otra persona para besarla.

Ninguno de los dos tendrá recuerdo de su inconsciencia, más que nada porque la consciencia, así como el tiempo, es continuo para quien esté montado en él.

Y, a todo esto, ¿no iba a criticar a Iker Jiménez? Cada vez que en un blog lo critican suben las visitas..., veré si tengo suerte.

Adolescentes manipulados por los intereses de los adultos.Interesados por ocupar el lugar de esos chicos.
Imaginen que sois unos monos y se os muere uno de vuestra tribu. Si lo dejáis por ahí tirado en el suelo entonces las alimañas reconocerán el olor, incluso en estado de putrefacción podría atraer enfermedades. Podemos imaginarnos también cómo todos los mamíferos sienten lástima por sus seres fallecidos..., se trata de una jugada de la evolución que no tienen los animales de sangre fría. Es decir, de manera instintiva, cuanto más grande es un mamífero, más posibilidades hay que sus congéneres tengan la necesidad de apartarlo o darle entierro.

Ese instinto puede ser resultado de siglos de evolución, en combinación con el hecho de que los simios que más se parezcan al homo sapiens son muy débiles..., así que, sin saberlo, sus genes les empujarán a actuar de manera que la especie sobreviva. Como explicaba Dawkins, a través de memes éstos van adquiriendo un objetivo: su propia supervivencia, que es la razón por la cual existen, y se confrontarán proporcionalmente con otros memes. En el mismo instante en el que un meme tenga proporción de 0% o 100%, toda la comunidad memética se extinguiría.

Pues señores, esa es la consciencia: se trata de un meme que no puede trabajar de manera aislada, necesita un tablero de ajedrez y una confrontación. En nuestra cabeza es lado derecho y lado izquierdo: el izquierdo es jerárquico y el derecho es interpretativo. De la misma manera, gracias a que existe tal confrontación, si alguien de fuera intenta poner sus fichas contra una de las partes, en la medida en la que sus jugadas no sean muy poderosas a penas repercutirá sobre el conjunto; es decir, si admite nuestra consciencia el ser manipulable mediante algún tipo de lenguaje introspectivo, sólo la capacidad que tenga ésta de gobernar en su terreno le permitirá no ser manipulada.

¿Os acordáis del personaje que gobierna la mente de los demás con su pensamiento? No pienso hacer spoils.

Abrir las puertas de la consciencia equivale a no considerar la verdad, para redefinir lo auténtico.

Al final, la consciencia sólo es una impresión que tenemos a partir de la lucha continua que tenemos en nuestra cabeza por sobrevivir. Una sensación de continuo. De la misma manera, cuando un niño le pregunta a sus mayores porqué ponen al abuelo bajo tierra, el lado derecho asocia las palabras con el acto en sí, y necesita justificarlo. No lo harán con el lado izquierdo, el lógico - lo harán con el derecho, porque si lo venían haciendo era por motivos biológicos, y no lo sabían.

Así que si sabemos que en una cultura practican ceremonias para enterrar los muertos, eso no significa que crean en un más allá..., lo que significa es que adquirieron un lenguaje y no han desechado algunos dogmas inherentes al uso de la razón.

Algo así ocurre con los círculos de las cosechas: se busca la confrontación con los pares (peers). Se busca que todas las personas de la Tierra tengan conocimiento de un concepto dentro de un lenguaje, para que así algo de fuera, con fichas débiles, quiera hacer una jugada y ésta no repercuta al conjunto. La cultura del lado derecho deberá unificar de manera creativa las hipótesis necesarias para afrontar los nuevos retos que no entiende el lado izquierdo. 


Es decir, que si aparecieran sin más nos volvíamos gilipollas.

Dicen que si recuperáramos todo recuerdo de nuestro pasado ganaríamos ¿Seguro?




Suficiente hasta aquí. Sean conscientes hasta que toque irse a la cama.