lunes, 27 de febrero de 2017

Guerra de sexos y herbivorismo

Se ve a un hombre rascándose el culo,
tocándose el paquete,
y luego una mujer le toca la mano y 
se muerde las uñas
hoy explicaré porqué ese anuncio es machista

En una guerra como éstas, ¿quién va a ganar seguro?
Hoy quería hablar sobre Igualdad, y de una pequeña conspiración absurda que se están marcando algunas personas - a modo de farol. Veré lo que voy exponiendo. A ver si esta vez consigo exponer de forma suficientemente clara los conceptos.

Hay quien piensa que cuando se hace un chiste sexista, dependiendo de cuál sea la víctima, se puede considerar si es machista o no; pues bien. Mi intención es explicar que eso no es para nada cierto: un chiste que marca diferencias por razones de género dentro de una sociedad donde el chovinismo establece roles bien marcados, en realidad lo que hace el chiste es una propaganda sobre el uso de tales roles. Si el chiste hace gracia es porque, en el fondo, manifiesta una realidad estructural. Y lo mismo sucede con los anuncios de televisión, las canciones o las películas.

Dicho esto, diré que yo mismo suelo gustar del humor negro para encararlo frente a las personas que tengo delante, siempre y cuando pueda conseguir ese halo de deportividad y evitar el linchamiento o el trauma. Los chistes negros a la cara, como para jugar con quien tienes delante; nunca hablando en serio, o nunca pretendiendo el filosofar.

Los chistes sexistas afectan a hombres y mujeres desde dos perspectivas diferentes
Es por ello que quien defiende la igualdad, si realmente fuera una persona experta, se preocuparía de atacar toda inclusión de ese humor negro en el terreno de la ontología, en el terreno de la filosofía o la ética. Y para ello hay que vigilar el uso de los términos y el contexto en el que se usan. De hecho, a mi juicio, para eso debería estar la Real Academia de la Lengua; con apreciaciones ideológicas dentro de las diferentes acepciones, y así evitar ser políticamente correcto al mostrar las vergüenzas que cada visión dogmática pretenda censurar.

Sin ir más lejos, el deep web, o el Internet de los noventa, está lleno de terminología absurda..., más allá de la realidad social que vivimos (o no), y que derrocha una imaginación desbordante de lo lejos que puede llegar un diccionario a la hora de inventar palabras nuevas sólo para clasificar tribus urbanas.

Espero que no se ponga de moda los machunos con sombra de ojos...
Lo que iba a comentar era que la antropología reconoce las sociedades patriarcales que, principalmente, significa que el protagonismo y la cardinalidad de las decisiones que se adoptan en esas tribus está centrado en el varón. Negar que hoy día, por muchos absurdos que se incluyan en España para favorecer a la mujer por ser mujer contra los derechos inherentes del ser humano, nuestra sociedad es patriarcal supone no darse cuenta de qué es lo que se entiende por el privilegio de ser un líder cardinal.

Este personaje, maestro de un mago varón, de haber adaptado yo el guión habría sido femenino.
Los cambios que necesita una sociedad para anular su patriarcado y crear un enfoque igualitario, nos lo dice el sentido común, es mediante vías igualitarias. La discriminación positiva surge para apoyar administrativamente y temporalmente, ante un empate técnico, a la minoría para ayudar a crear una imagen igualitaria en el inconsciente de la gente. Pero nunca un acto de condescendencia: nunca concederle a una persona privilegios por haber nacido de tal sexo o cual raza. Eso es algo que sólo se hacen en países fascistas o con fanatismo religioso, lo que nos dice que, efectivamente, los miembros del constitucional habría prevaricado para aprobar en España la ley contra la violencia de género. Insisto en que, lo que es de sentido común, ni me lo planteo. No me consta en absoluto de nadie que sea capaz de llegar a un tercer grado, de ser coherentes de verdad, y mantener su manera contaminada de enfocar la discriminación positiva.
Se está creando un ente reprimido por nacer mujer, sus creadores son ellas mismas
Dicho esto, vamos a ver si vamos al meollo. La historia del feminismo de la tercera ola ha sido algo realmente demencial. Hoy día tenemos dos tipos de colectivos que defiende ser feministas, y hay colectivos que odian esa palabra y defiende la igualdad de sexos. En cualquier caso, el estado discrimina al varón de manera dolosa y con un marcado carácter mafioso..., como veré si más adelante detallo cómo. 

El hecho de que el estado de derecho español sea hembrista y, por otro lado, la mayoría de las familias españolas y sus comportamientos sean patriarcales nos lleva a una situación perfecta de guerra de los sexos, tal como se teorizó en su momento con la llegada del feminismo de la primera ola.

Existe un factor independiente de género que es el motivo de la violencia más cotidiana
Hoy día mentir a la policía española siendo mujer sale tan gratis como mentir a la policía estadounidense siendo blanco. Si hay algo que sabe hacer muy bien una persona manipuladora es hacer una llamada de teléfono solicitando un héroe y así conseguir un exclavo. Se trata del sesgo de estatus quo: en este caso, soy débil, por tanto tengo razón.

- Vosotros sois unos cerdos...
- ¿Y tú quién te crees que eres que no nos conoces de nada?
- Vosotros sois unos cerdos y sin embargo yo soy una mujer.
Stop feminazis.

Me recuerda la vez en el que una mujer llamó a la policía porque resultaba que yo había parado el coche de mi jefe en segunda fila, por motivo de carga y descarga y ella necesitaba salir. Y, efectivamente, en vez de avisar a esa persona que cargaba cajas en el vehículo, correctamente parado, con sus luces, le pareció más oportuno llamar a la policía. Y, cuál fue mi sorpresa que, no sólo la policía se dispuso a ponerme la multa a mí, sino que además le dio al agente por intentar justificar el testimonio sesgado que recibió por teléfono: le dio por decir que el coche estaba estacionado, y claro, si estaba estacionado, ¿por qué estaba abierto? ¿por qué no esperó los siete minutos reglamentarios? Con tal de justificar ese acto heroico, al final acabó por inventarse la multa y escribir cualquier cosa imaginativa..., ¡héroes al poder! Hasta que no cogí la multa, que no firmé porque eso era más falso que una sentencia firme española, no me informó la policía de que había una mujer atorada por culpa de cómo paré el vehículo..., y entonces fue cuando fui atando cabos... En esta historia, que es mucho más larga, conseguí que esa mujer se disculpara conmigo, pero lo normal es ver cómo se mantienen, sobretodo los propios policías protegiéndose entre sí, en base a una acusación no bien fundada.

Hasta ahora puedo decir que sé de casos que sí son sangrantes, ya sea contra un sexo o contra el otro. Pero los ejemplos hay que ponerlos para ilustrar cómo la sociedad está malenfocando el problema. Y, por supuesto, las leyes no hacen a las costumbres. Si la sociedad tiene unas costumbres chovinistas, las leyes sólo pueden o sancionar (pulir para bien) las buenas costumbres o reforzar (apología) las malas costumbres. Quien  crea que poniendo leyes injustas la sociedad se regula vive en el País de las Maravillas.

Un personaje fascinante en la película ensombrecida por unos guionistas machistas.
La manera de luchar por cambiar las malas costumbres por buenas pasa por levantar los ídolos culturales que necesitamos. Pasa por denunciar las malas prácticas y decir qué es lo que no pretendemos. Si no se incluye un feedback que permita pulir las malas prácticas, toda organización se convierte en una secta. Y no hay secta posible que pueda dar lecciones a una democracia desde el activismo. Es incompatible e imposible.

Vemos diarios progresistas que dan pábulo a ideas llenas de odio que fomenten la guerra entre hombres y mujeres. Sin embargo, ahora viene lo gordo, resulta que podrían haber motivos lucrativos. Se trata de una forma de corrupción que han descubierto los partidos políticos, como lo son los ERE o la Gurtel. Se trata de una forma de terrorismo usado por los medios de comunicación para permitir la muerte de mujeres mientras los periodistas FINGEN que denuncian esas actividades. Gracias a lo cual pueden entrar en el juego de la disidencia controlada marcada por el patriarcado.

Todo ese dinero de por medio, lanzado desde el estado, supone un rescate que, posiblemente, ni los propios bancos habrían soñado recibir en tiempos de crisis. Una de las principales economías de este planeta ve cómo el dinero se va por el sumidero - esperemos que realmente vaya a las víctimas, sin embargo ¿es posible que lo que se va contando por los mentideros, y no soy periodista, sea cierto? ¿Es posible que tanto PP como PSOE hayan encontrado un mecanismo de financiación ilegal y puertas giratorias a través de las subvenciones a víctimas de violencia de género y por eso hay tanto silencio? Sería una continuación a lo que ocurrió con los ERE o los fondos de reptiles. Más corrupción, pero en esta ocasión estarían involucrados los periodistas, por una cuestión de omisión del deber.

- Han negado la existencia de movimientos extremistas que fomenten el odio.

- Han negado la intromisión violenta de los extremistas para ningunear a los colectivos pro-igualdad.

- Han negado la manipulación de las madres hacia los hijos para que repudien al padre.

- Han negado el derecho de los padres separados a réplica.

- (Si continuara la lista, que es descabelladamente larga y atenta al sentido común, dejaríais de leer prensa española)... etc.

En este contexto es cuando voy a explicar en qué cosiste un plan que se ha querido atribuir el Rockefeller pero que, por supuesto, en realidad no se trata de una atribución, sino de una promoción. Es decir, detrás de ciertos grupos, hay donaciones de cierta clase de gente rica. Y ahora veré si transmito de manera que se entienda sin las contaminaciones de toda esa ingeniería social que se ha generado, y que atenta contra los movimientos de igualdad y, por ende, contra la mujer y su integridad física y moral.

Últimamente se está poniendo muy de moda entre la gente rica los problemas de superpoblación, ecología y lo que podríamos llamar la desigualdad entre ricos y pobres. Desde este blog ya he propuesto una solución integral, dando a entender que esto se va a tener que hacer sí o sí. En el sentido de que si no se hiciera, los que salieran vivos del caos reinante acabarían haciéndolo (como aparece en mi novela). Y, de hecho, se está avanzando en esa dirección desde la cumbre de Davos.

Pues bien, existe otra solución, consiste en convertir a los hombres en herbivoristas. Si hubiera menos gente, entonces consumiríamos menos y los pocos que fueran quedando podrían centrarse en sus carreras profesionales para asegurar que sus descendientes no sufran desigualdad. Por tanto, los herbivoristas (soushok-key, que en castellano suena como a socho-kukey) , idea extraída del japonés Maki Fukasawa, tienen por objeto seguirle el juego al liberalismo no teniendo relación (ya sea hombre o mujer) con ninguna pareja para satisfacer su carrera profesional por encima de todo. De ahí que, de haber descendientes, sea o por accidente, por apadrinamiento o por familiares sucios.

En la novela Luces y espectros ya incluí un personaje así. Y, debo daros una mala noticia: como defensor de que la revolución de los ídolos se tiene que hacer desde dentro, yo también soy así. Sin embargo, adopto esa postura porque no vivimos hoy día en una sociedad donde las relaciones se puedan llevar a cabo con responsabilidad, no porque defienda esa manera de vivir.

Pero volvamos a la cosa en cuestión, Rockefeller, lo único que puede hacer para evitar rentas básicas y cosas así, es que todas las personas se vuelvan herbívoras. Y, para fomentar ese tipo de actividades, utiliza todo ese dinero que le sobra..., y le sobra bastante, para fomentar ideas pseudomarxistas (en realidad es anarcocapitalismo escondido) como el feminismo de la tercera ola. La creencia de que el feminismo nació en Bilderberg es una conspiranoia completa, ahora bien, que tanto Soros como Rockefeller están destrás de ciertos movimientos pseudo-marxistas que tienen por objeto controlar la disidencia..., poco a poco se va dejando ver por la poca credibilidad que destilan los medios, los jueces, etc...

Se trata de motivar a que las mujeres digan que odian a los hombres. De esta manera se alimenta la guerra de sexos que, se sabe, acabará mal para las mujeres. se trata de hacer callar los movimientos por la igualdad, o de crear muñecos de paja en su nombre..., de esta manera podría motivarse la creación de leyes absurdas, el aumento de suicidios de varones por motivos del feminismo (como pasa en España o Canadá, por ejemplo), el aumento de la represión contra los casados (varones, para ser coherentes)..., es más fácil anular al varón que anular a la mujer en una sociedad democrática. 

Es decir, si tienes que esterilizar (herbovirizar) a una población democrática, no podrás hacerlo contra el sector más débil, pero sí contra el sector más fuerte - usando el sesgo de estatus quo. Pura ingeniería social. Pero para hacerlo sólo hay que poner pasta, ¿dónde? En las sectas que tengan esa clase de comportamientos.

Pero claro, algo así podría ser denunciado por la prensa..., ¿veis como ahora todo encaja? ¿Veis por qué estoy tan cabreado con esos traidores que, teniendo la verdad delante siguen con esa farsa?

A mí se me hace cada vez más evidente: saben que mienten, por lo que se autoengañan por una cuestión de dinero.

¿Y qué es lo más triste? Que este proceso oculta la verdadera razón por la cual hay tantas agresiones en el hogar. De hecho, este tipo de leyes contra los Derechos Humanos, que son la vergüenza de toda Europa y del mundo entero (y tampoco lo dicen en la prensa) como era lógico provoca un aumento de la violencia del fuerte contra el débil (la mayoría de los hombres contra la mayoría de las mujeres, y la mayoría de las mujeres contra sus hijos).

¿Qué comportamiento reconocido por la psicología se está encubriendo? Pues muy simple, una discapacidad famosa: la psicopatía. De hecho, es tan famosa que ni siquiera es considerada una discapacidad... Ni tampoco es un problema a tratar. Vemos comportamientos violentos, pero no nos preocupa el tratar a esa gente..., luego aparece el típico periodista diciendo que se trata de un machista, o no reconociendo la existencia de ese psicópata por ser mujer o porque la víctima es un hombre..., todo un despropósito.



Suficiente hasta aquí
quiero vuestros comentarios