sábado, 16 de julio de 2016

¿Molesto?- Sí ¿Insulto?- No. Gracias

Hoy voy a hablar de un tema 
que me está empezando a reconcomer
efectivamente será sobre la Tolerancia
¿a qué estamos legitimados para tolerar? No, eso ya lo dije una vez
¿cuándo podríamos perder nuestro instinto tolerante?

Cuando la fama no te cambia, date por destruido
La Tolerancia es un instinto que tenemos absolutamente todos los animales, porque es una funcionalidad necesaria de la mente para sobrevivir en un ambiente hostil. Se convierte, por tanto, en una de las cualidades más interesantes que tiene que ser implementada necesariamente dentro de un sistema de información que pretenda tener comportamientos tildados como inteligentes. Es por ello que la Tolerancia no sólo es un signo de debilidad cuando no se entiende, sino además un signo de inteligencia se aplique correctamente o no.

Para entender lo que pretendo decir procuraré ser ilustrativo: una manada de arces está oteando el ambiente. Entonces un arce reacciona con velocidad porque cree haber visto algo. El resto de los arces, valoran el mensaje emitido por la amígdala del primero y sus correspondientes amígdalas reaccionan con un efecto en cadena. Si el que reaccionó de esa manera no se encuentra en una escala jerárquica lo suficientemente alta, entonces la pugna entre lo que ve cada arce y el temor interno se resuelve mediante un criterio de Tolerancia

Es decir, sabemos que somos tolerantes cuando tenemos un criterio: una fórmula. Y sabemos que la fórmula es correcta si funciona.


Cuando una persona sufre una transformación importante en su vida, los criterios que siempre usaba puede que deje de servirle. Pasar a la fama de pronto y porrazo supone un handicap a los criterios que uno tiene: necesita mecanismos para saber manejarse con sus seguidores. Esos mecanismos idealmente se aprenden antes de los ocho años (o eso digo yo), porque la tolerancia forma parte del lenguaje y la pragmática (cortesía). Así que es posible que la llegada de las nuevas tecnologías nos haya traído personajes especialmente intolerantes..., aunque yo centro las razones en una educación no orientada a este tipo de Tolerancia.

¿Cómo se puede enseñar a niños de hasta ocho años el peligro de las redes sociales sin habilitarles el acceso? [La cuestión tiene bemoles porque, efectivamente, si las redes sociales son peligrosas entonces, ¿cómo es que no se les permite el acceso? Y, efectivamente, la solución no pasa tampoco por habilitárlas sin más]


Yo aquí me centraría en un tema muy recurrente que aparece en la novela Luces y Espectros. De cómo en ocasiones pueden aparecer líderes, gente victoriosa por asuntos futiles (como ganar campeonatos, ser deportivos en juegos de equipo, etc...), y también gente que no suele obtener victorias. Los deportes, sin ir más lejos, suelen ser de no más de 22 jugadores..., si se tiene la suerte de disfrutar de grandes pistas, claro. Y resulta que las redes sociales se manejan con cifras que superan con creces nuestros instintos naturales de percepción de números cuando se trata de hacer relación con otros semejantes. Así que enseñar a los chavales con deportes de equipo..., va a ser difícil.


Es por ello que, si resulta difícil imaginar cómo enseñar a los niños la pragmática que van a vivir en las redes sociales, entonces debemos asumir que cada vez que alteremos el número de fans a nuestro favor algo en nosotros va a tener que cambiar..., sí o sí. No puede quedarse nadie indiferente..., y el que luche contracorriente se enfrentará a un pequeño detalle: que puede que se haya vuelto un completo inconsciente, aunque tenga la amígdala completamente sana.
Al final, lo que nos conduce a asumir cuáles son los roles sociales que nos deben hacer temer perder amigos, estatus, etc..., dependerá de cómo hayamos entrenado a nuestro sistema del miedo, a los criterios que tengamos de lo que es la Tolerancia. De ahí que sea tan importante adoptar decisiones al respecto: ¡cuántas personas he visto sucumbir a la mezquindad sólo porque ahora eran seguidas por decenas de miles de individuos! 

Pero no conozco a demasiadas que, tras arrebatarles el alma, perdieran su buen juicio. 

¿En qué consiste el juego de arrebatarle el alma a una persona?

Un niño hace de diablo y otro de estrella del rock. El resto son fans. El juego consiste en representar la diferencia entre que te arrebaten el alma y que no te la arrebaten.


Mi teoría es que cuando se percibe la diferencia, y los fans aprenden a intentar hacerle la vida imposible a su estrella..., entonces se activa en el cerebro el gen que habilita el criterio de tolerancia que nos hace falta. Es el gen que dice que hay una diferencia entre tener alma y no tenerla, como para que afecte a la fama. Aunque suene a entelequia el truco estoy seguro que funciona de cojones.


En cuanto al resto de las personas, que ya han superado los ocho años y desean recuperar el tiempo perdido les digo: mirad con atención y buscad ayuda.





Suficiente hasta aquí
¡¡dejad algún comentario al menos!!
No dejéis sentar mis dogmas








viernes, 15 de julio de 2016

Test 4. Intentando crear un ambiente terrorífico.

A cuerpo de rey las verdes praderas refrescaban los prados con un viento mañanero que invitaba a levantarse. Allá quedaron los años donde mamabas de tu madre peleando con el resto de las terneras por un momento de placidez. Los pinos que resecaban la tierra invitaban a que las madres tuvieran un momento de relax bajo las sombras acolchadas. De vez en cuando una ráfaga de ninfa placidera tiritaba las orejas mientras invitaba al murmullo de una vida que medraba y descansaba un sueño no vívido. Y fue un sueño. Una nostalgia de algo que tenía impreso en la sangre.

Todos apelotonados en el pasillo. Gritos en el exterior. Todo es oscuridad. No queremos dañarnos entre nosotros, "cuidado con los cuernos, colega". "Lo siento, es que estoy nervioso y no sé qué pasa". Todos se comprenden, y pretenden tener cuidado. Dejan paso al macho alfa, poco a poco le ceden más pasillo. Esos hombres también empujan desde atrás al más vivo de todos, al más preocupado y consciente de las circunstancias. Debe estar el primero, ya le han torturado previamente a la corrida bastante - no vaya a ser demasiado peligroso, demasiado consciente. La puerta sigue cerrada.

Será abrir la puerta, suenan explosiones, vítores. Todos salen disparados. El trayecto es único, hay que salir adelante. Se oyen gritos, silbidos, más explosiones..., ¿qué van a hacer con los nuestros? ¿Por qué me han destrozado el cuerpo y me siento tan pesado? Los demonios de la cabeza están acechando, están picando a todo el cuerpo y claman el lamento de no saber qué se encontrarán después. No hay manada, son compañeros que luchan por ir a alguna parte.

Por delante los ángeles nos acompañan. Volamos por las praderas mientras los gritos nos confunden. Soñamos en la creencia de que ellos nos quitarán todo lo que se nos eche encima, y libraremos toda esta plaga de demonios para limpiar tanta contaminación de odio en el ambiente. No hay momentos para la duda ni para las preguntas, el líder ya ha decidido su camino y mejor estar juntos y en grupo.

Pero yo he oído un grito. Desde atrás he oído algo. Algo me ha enturbiado y me ha hecho pensar que tal vez no hemos limpiado bien la calle. Me doy la vuelta y veo a dos de esos. Uno porta la mirada del miedo, el carácter infantil, la estupidez, la inocencia..., le atacan los suyos. El otro porta el odio contenido, los ojos de fuego, el estar fuera de su lugar, el cuerpo preparado..., es un líder, es uno de ellos. Es un culpable: ahora soy consciente y me he dado la vuelta. Ahora me doy cuenta de cuál debe ser limpiado de este pazo para que desaparezcan los vítores, los gritos..., para que vuelvan las verdes praderas. Otra cornada, me empitona su sangre que me hace sentir vivo. Algo en mi interior me dice que esto está mejor así, y debo mantenerme, mantengo el hilo..., no me convencerán, porque éste es el líder y voy a limpiar de maldad a este mundo. Porque sé que mi manada me necesita, soy portador de la Virtud y éste es el pago que debo saldar con el arconte de la Torre.




Bueno, dadme vuestros comentarios.


jueves, 14 de julio de 2016

Porqué una novela de tirada juvenil

Cuando decidí sobre la temática
pensé en una novela para jóvenes
la razón es porque existe un punto
donde el miedo a trasmitir puede ser tan trascendente
hasta el punto de que podría parecer transmitir traumas del propio autor
cuando sólo es literatura


Cuando deseas mezclar mensajes filosóficos con historias de terror, desde mi punto de vista, no veo fácil, por no decir que me parece imposible, conseguir hacer que la novela sea de adultos. Es decir, los mensajes de calado filosófico provocan en el individuo la sensación de que el autor está hablando de sí mismo - lo cual por la fuerza, tiene que ser así. Y, por otro lado, las películas de miedo es normal que pretendan recrear traumas, ilustrarlas al menos..., cuando se juntan ambas cosas podría dar la impresión de que el autor se cree envuelto en la mentira que intenta formar.

¿Quién necesita vivir aquí?
Desde la posición de la autoría, el creador de la locura transmitirá el mundo conocido impregnado todo con distintos halos que infundan miedo (ya que ése es el género escogido), entonces es cuando las personas empiezan a tenerle más miedo a la vida real del autor que a la ambientación que pretende generar la novela. Se hace, por tanto, imperativo que si se pretende manifestar una historia que genere miedos profundos que, de alguna manera, existan rasgos infantiloides, estrambóticos..., lo que ya comenté hace meses en otra entrada.

En lo cotidiano también tenemos muestras de absurdas necesidades
La gente no se da cuenta de que todas las personas ignoramos muchas cosas, incluso ignoramos que ignoramos (tenemos necedades)..., los hay que, debido a su necedad, manifiestan su orgullo a un comportamiento inaceptable (mezquindades)..., pero todo es circunstancial, todo es incluso debido al ambiente tóxico en el que vivimos. No somos conscientes de que muchos son innecesariamente grandilocuentes, de que muchos se complican la existencia como se suele caricaturizar a algunos personajes de ficción.


Hay cosas que nos debería dar mucho miedo, y se encuentra en lo más cotidiano. Perder lo que más necesitamos es lo que más nos debería generar miedo. El hecho de que una víctima de torturas acabe con su opresor en mitad de su huída, es bastante natural, genera sosiego. Se le llama justicia poética. Y es correcto: ¿acaso no se está intentando proyectar entre los comportamientos adultos actos que no podríamos justificar a los niños? Según mis perspectivas: lo que no podemos explicarle a un niño por temor a que nos acusen de tóxicos, traumatizados..., no es justificable a un adulto. Piénsenlo, desde el principio ¿por qué una novela de jóvenes?

¿Cómo le explicas a un niño esto?
Hace tiempo expliqué de que hay dos tipos de falacias, pero lancé el postulado de que toda falacia se fundamenta en aplicar el operador de silogismo incorrecto; esto es, aplicar el material sobre el lógico o el lógico sobre el material. Explicar la mala argumentación es difícil, sobretodo cuando alguien se cree lo suficientemente adulto como para que nadie le pretenda explicar nada - hay que evitar la discusión entre necios.

Esto tiene analogía con la pragmática: si desarrollamos la pragmática desde el punto de vista de la teoría de la argumentación, observaremos cómo lo inadecuado se vincula con el mal uso de la pragmática - es decir, con llevar a cabo falacias. Es decir, por aplicar un silogismo equivocado.

Según la teoría, que se ha estado consolidando desde que se propuso hasta ahora, del cerebro triuno: la mayoría de los mamíferos compartimos los mismos sentimientos. A medida que hemos estado avanzando con experiencias, desde entonces (1950), todo han sido confirmaciones. Ni una sola refutación, ni percance, ni detalle, ni..., nada. Desde el punto de vista de los sentimientos sólo hay una cosa que nos diferencia del resto de los mamíferos: estamos acostumbrados a comérnoslos. Tan sólo los osos y los felinos están por encima nuestra en cuanto al placer de probar la carne de otro mamífero. Pero claro, si estamos dispuestos a decir que somos superiores (conscientes), lo debemos ser en todos los sentidos.

Engañó a su instinto innato y ahora todos son veganos
Cuando un grupo de personas creen que sus vivencias (experiencias) conforman la regla, lo que están haciendo es imponer sus ideas más conservadoras (tradiciones) por encima de la posición que le correspondía al progreso y comete una falacia (fallo en la argumentación, error en la pragmática) al pensar que está bien hilado su pensamiento. El uso del silogismo lógico donde corresponde el silogismo material genera una sensación de estar manejándose con verdades incuestionables que, además, afectan al día a día sobre la ética (como cualquier religión).

Vigilen sus dogmas, yo lo haré con los míos.







Suficiente hasta aquí 
quiero vuestros comentarios
no dejéis sentar ningún dogma




martes, 12 de julio de 2016

Escarvando en las profundidades

Poco a poco algo se está moviendo, 
aquellos que pueden veros han observado algo...
poco a poco somos más capaces de atisbar
y algún día el pacto social supondrá
el final del chovinismo


Muchos han caído en los proyectos increibles que se montaron, que exclavizaron a personas para que se sintieran orgullosas de lo conseguido. En su tiempo, el levantamiento de las pirámides provocó la recreación y montaje de los memes de la mitología ejipcia..., se crearon unos arcontes que marcaron la pauta de cómo interpretar la felicidad, la moralidad, el drama...


La transformación del individuo que nos representa, aquello que somos y que nos sentimos identificados con él. La posibilidad de volvernos superpersonas: capaces de respetar las barreras que nos impone la Tierra para reinterpretarlas.


Entraron siendo exclavos, hombres y mujeres de todas las clases sociales..., y salieron dueños exclusivos de su propio trabajo, el polvo que generaron. El proletariado marca el ritmo de cómo se debe trabajar, no puede ser al revés. Porque tras la democracia laboral obtendremos la armonía.


Los llamados conspiranoicos tienen miedo, ven cosas que se han visto antes. Y en sitios horribles. Pero algunas son nuevas, diferentes. La pregunta es quién vigila a quién, quiénes juegan con quiénes..., cada actor tiene su movimiento, su imagen, su presencia... Para cada cual tiene un mensaje diferente. Ahora bien, ¿hacia dónde van las cosas? Si van para peor, ¿por qué les siguen el juego?

Esta ceremonia fue muy europeísta, no faltaron las menciones a cada una de las divinidades preferidas por los masones, para ver cómo eran los trabajadores los que marcaban el ritmo, los que les hacían frente... Esos masones eran los que financiaron el cotarro, pero como ya expliqué hace tiempo: se trata de una lucha interminable, de un encaramiento donde el ritmo lo tiene que marcar la fuerza del trabajo.


Aunque, por supuesto, esta es mi interpretación.





Quería hablar de otra cosa,
pero ha surgido esto
Quiero vuestras opiniones




domingo, 10 de julio de 2016

Microrrelato. Los ancianos

Hay secretos que nunca jamás
deberán ser desvelados porque, 
si se hiciera,
sería el final de las ilusiones


Microrrelato. Los ancianos

Es bien sabido que en toda Confederación, para que pueda ser reconocido su liderazgo dentro de la Federación intergaláctica, se debe cumplir un requisito especial: cada uno de los miembros de su órgano directivo (Consejo) debe ser lo siguiente a ser un adulto. Bien podemos llamarlos ancianos, sin embargo no nos equivoquemos, no se trata de una cuestión de edad. Sólo en las civilizaciones de nivel 4 pueden sus habitantes alardear de aspirar a encontrar algún anciano entre ellos.

Existe un término equivalente para los que no podrían ser ancianos, pero que en teoría podría parecer que han alcanzado el conocimiento y madurez necesarios; los llamaremos maestres, (o gran maestre debido a que es probable que sea único en su especie) - aunque tiene connotación negativa entre el Consejo de la Confederación Galáctica al que pertenezca: porque suena como si fuera una especie de "senador oficioso".


Desde el punto de vista de las civilizaciones aún salvajes, esta postura podría ser considerada un acto discriminatorio; sin embargo desde el punto de vista, no sólo de toda la Confederación, sino además de sus maestres, esta medida tiene todo el sentido del mundo; se hace en aras a la defensa de la Libertad y para el cumplimiento del Pacto que tiene cada uno dentro de lo que espera de ella.


¿Quiénes somos nosotros para cuestionar esa sabiduría o vernos al mismo nivel que un anciano si aún no somos capaces de ser felices por nosotros mismos? La única realidad es que en las sociedades hay secretos que, de desvelarse, podría provocar que aquel que deba aprender se intoxique. Cuando observamos personas que pueden ser intoxicadas con la realidad, podemos decir que no son maestres, y mucho menos ancianos. Aquel que no es anciano siempre correrá el riesgo de ser víctima del filo de una espada oculta en algún rincón de una civilización de este universo.


El endurecimiento y la testarudez puede llevar a personas muy orgullosas a no percatarse de que, por muchas experiencias que hayan vivido, no están capacitadas para adoptar decisiones que no intoxiquen a las civilizaciones representadas en su zona del universo. Y es que existe una edad que sólo es alcanzable mediante el conocimiento gremial tomado en su último grado: el mismo conocimiento que es capaz de hacer daño a la gente.


El anciano tiene tal poder que su sola palabra le basta para hacer sucumbir al universo a sus pies, y nada en este mundo es capaz de herirle..., o eso dicen. Puede que sea una leyenda de maestres...

Registro a4f100 :: 245.23.43.40: JMDR. Los ancianos.




Que tengan un buen día