viernes, 21 de julio de 2017

Puede que la cosa avance

¿Me engañan los ojos?
¿Es posible que, a pesar de las feminazis, 
la agenda avance?
¿Veremos el final de anuncios vergonzosos
por las calles por demanda popular?

Su retirada: una victoria. Los fans no mandan.

A mí los hermanos Adriá me caen bien, y parece que les ha caído una bien gorda: no por ser machistas, sino porque, empero, en ese tipo de restaurantes se aprovechan de la situación precaria de la gente; y eso es lo que realmente ha incitado a mirar de reojo si es ético lo que usan para publicitarse. Quizá me equicoque, pero el que una loca grite que se ven culos en un anuncio..., mientras enseña las tetas, pues no creo que convenza. Pero si está criticando a un poderoso, que tiene fama de machacar al débil, entonces la cosa cambia.

Quizá la década milenial está pasando página..., ¡pero de qué manera! Nada ha sido previsible, por supuesto. Pasarán muchos años antes de que consigamos vivir una sensación de dignidad en nuestro entorno más cuotidiano, pero cualquier esfuerzo y espera será para mejor. Mientras tanto hay un sabor amargo que me llevo: la figura más representativa del personaje de Gug (o del deber de un soldado con Pedro, o Lucía) quitando a George Michael, ha terminado por suicidarse. Las historias que dejó el grupo fue una inspiración para la novela. En definitiva, Chester Bennington, el vocalista de Linkin Park..., quizá acosado por la soledad de la dureza de sus fans... Me rompe todo esto un poco.



Poco a poco las personas irán demandando nuevos estilos. Algunos probarán algo nuevo, no les saldrá, y los fans se volverán furiosos contra sus artistas. El mundo está cambiando, falta una fórmula nueva. La fórmula nueva no es difícil de adivinar cuál es, sólo espero que no se lleve a ni una víctima más. No hay que olvidar que el fanatismo, el afán por querer tener al ídolo en tu posesión, poder obsesionarse hacia él..., todo eso venderá (como cuando en el Youtube español todas van a por el mismo), parece que eso vende y por eso aún no se denuncia. Pero se denunciará, poco a poco. Al final deberá de globalizarse los derechos de las personas, las redes sociales deberán normalizarse..., poco a poco las personas empezarán a respetar a sus ídolos..., no sé, para que no se suiciden, al menos.

Si hay un buen motivo por el cual jamás se me habría ocurrido hacerme famoso en cualquiera de mis décadas fue porque me habría convertido en alguien muy parecido a dalas, el youtuber más zarandeado y del que más se aprovecha la empresa Google ilegalmente. Pero nada, el tiempo le da la razón a quienes la tienen; hay que ser fuertes. Hay que avanzar.


Y puede que vivamos cambios..., poco a poco veo una luz al final del tunel.









Dejad vuestras opiniones 
sobre la obsesión de los fans
¿están destruyendo la cultura
o la fomentan esos HP?
No dejen de sentar ni uno de mis dogmas




Descanse En Paz